El mindfulness es una forma muy simple de meditación. Las afecciones como la fibrosis pulmonar pueden producir preocupación y ansiedad adicionales acerca del futuro. Muchas personas dicen que se estresan mucho y tienen dificultades para enfocarse en las cosas importantes de la vida.¹

El mindfulness puede ayudar a aliviar algunas de sus preocupaciones, de manera que puedan enfocarse en cuidar de sí mismos y pasar tiempo de calidad con sus seres queridos.

Mitos frecuentes sobre el mindfulness

Algunas personas son precavidas cuando escuchan el término “meditación”. Sin embargo, podría ser útil disipar algunos mitos frecuentes:

• La meditación y el mindfulness no son una religión. El mindfulness es simplemente un método de entrenamiento mental.

• No tiene que sentarse con las piernas cruzadas en el suelo. Puede practicar la mindfulness en cualquier espacio en el que se sienta más cómodo.

• La meditación y el mindfulness no son difíciles de practicar. No se trata de tener “éxito” o “fracasar” al practicarlas.

• Practicar  mindfulness no lleva mucho tiempo. Incluso una sesión breve puede ayudar a reducir sus miedos y permitir que la mente se enfoque.

¿Cuáles son algunos de los beneficios de practicar mindfulness?²

El  mindfulness lo puede ayudar a mantener una actitud positiva y a controlar cualquier emoción difícil cuando las presente.

Algunos de los beneficios del mindfulness incluyen los siguientes:

• Mayor felicidad y bienestar.

• Disminución del estrés, la ansiedad y la irritabilidad.

• Mejora en la memoria, la creatividad y los tiempos de reacción.

¿Cómo practico mindfulness?

Hay muchas maneras de practicar la mindfulness. A algunas personas les gusta participar de Mindfulness de manera guiada, donde un instructor (o una voz grabada) lo acompañará en la sesión de mindfulness. La mayoría de las sesiones se enfocan en aclarar la mente y permitirle pensar con claridad. Pueden durar desde cinco minutos hasta una hora.

Un ejemplo muy simple de una sesión de mindfulness sería el siguiente:

1. Siéntese en un lugar cómodo, como una silla o una cama.

2. Cierre los ojos y enfóquese en lo que siente en el cuerpo.

3. Respire lentamente. Enfóquese en su respiración, y sienta como ingresa al cuerpo y sale de este.

4. Advierta cuando la mente se aparte de su respiración. Cuando así sea, trate lentamente de volver a enfocarse en su respiración.

5. Cuando se sienta listo para el final de la sesión, abra los ojos y readáptese al entorno.

El  mindfulness consiste en observar sin críticas; ser compasivo con usted mismo cuando la tristeza o el estrés lo están fastidiando. El mindfulness le permite captar los patrones de pensamiento negativo antes de que lo atrapen hacia un espiral descendente. Con el mindfulness, se inicia el proceso de volver a tener el control de su vida.

Muchas organizaciones diferentes ofrecen servicios de mindfulness, incluidos hospitales, organizaciones benéficas y clases privadas. Para obtener más información sobre los servicios disponibles en su localidad, hable con su equipo de tratamiento.

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Su bienestar mental

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Conclusiones